Conciencia nunca dormida

Mi primer extraño encuentro con el Mindfulness, hace 28 años en clases de Castellano:


 “¡Conciencia nunca dormida,

mudo y pertinaz testigo

que no dejas sin castigo

ningún crimen en la vida!

La ley calla, el mundo olvida;

mas ¿quién sacude tu yugo?

Al Sumo Hacedor le plugo

que, a solas con el pecado,

fueses tú para el culpado

delator, juez y verdugo.”


Gaspar Núñez de Arce

Comentarios

Entradas populares de este blog

Estoy buscándote a ti

Ensayo sobre el Silencio

Oración a la Vida