Más allá de la piel
En la caída de tu vestido... se caen además los pasados, desaparecen las vergüenzas, se desatan los nudos, se deslizan los cabellos que te rozan la frente, te siento, te soy, te estoy. Que viento huracanado son tus manos cuando suben por tu perfil, cuando tocan tu tersura, y cuando rozan tu flor húmeda. La oscuridad de tus rincones, La claridad de tu sonrisa, El volumen de tu caderas, La comodidad de tu vientre, El misterio de tu mirada, Todo lo que te hace mujer, Todo eso que cruza el camino al centro de mi alma, Toda la música de tus gemidos. Me reta a verte más allá de nuestra piel.