Ascendente en Acuario


Con un pequeño impulso mi corazón lo entrega todo,
Me ilusionan las miradas como a un niño sus juguetes,
Saboreo cada beso como la miel de mis panales,
Soy latino, soy del centro, del norte, del sur, del mundo.

Mis labios han cantado esas canciones,
Que cruzan cada melodía al eco de mi compás,
Esas canciones que conocen muy bien el camino,
Al centro de mis latidos, al centro de mi vibrar.

Me sumerjo en la tierra y respiro el olor de su humedad,
Me dedico los amaneceres, los contemplo y agradezco su cielo.
Recojo las piedras y sostengo mi voluntad,
Escribo y jugueteo acordes, miro los caminos y recuerdo sus pisadas.

Miro a las personas y recuerdo sus historias,
Cada paisaje pintado de luz lo guardo doblado en un bolsillo,
Para en la noches abrirlo y dibujarme en el sueño que me proponga su brillo,
Me muevo con el agua y me deslizo por los recovecos del mundo.

Me alumbra el Sol, por ser mi estrella cercana,
Pero el fuego de la estrella que me forjó es mi verdadera guía,
La constelación del Cántaro se funde con la de la Cuerda,
Me dan su luz, su fuerza y su vigía.

Soy un trovero, un recolector de misterios,
Un escucha del sueño, un intérprete del viento,
Una lágrima en cada poema, un clic de todo paisaje,
Un niño, una odisea, un aterrizaje.

Soy un libro azul a medio abrir, y a medio cerrar,
La copa más alta de un árbol, la gota más cálida de una lluvia,
La ternura de un gemido, la fuerza de un grito,
El silencio de un pensamiento, y un destello en la silueta.

Soy el que nació en el día de la gran perseverancia,
El que deja ser como el agua que recorre un río,
Y se entrega al mar, a la montaña, al día,
al amor, a ti, a tu piel y a tu beso, hoy y siempre.

Todo esto en el lapso del infinito tiempo que cabe en un segundo.

Otaner




Comentarios

Entradas populares de este blog

Estoy buscándote a ti

Ensayo sobre el Silencio

Oración a la Vida